Al buscar en las páginas de las Escrituras, a menudo encontraras a Dios animando a su pueblo a no temer o no tener miedo. Hay muchos versículos en la Biblia que nos animan a no temer. Esto le permite a usted y a mí saber que Dios comprende nuestro carácter humano y nuestras emociones humanas. Observe algunos de los versículos en la Biblia que nos motivan a "No temer":
“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia” (Isaías 41:10).
“Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo” (Isaías 41:13).
"Jehová es mi luz y mi salvación; ¿De quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿De quién he de atemorizarme?" (Salmo 27: 1).
“Más también si alguna cosa padecéis por causa de la justicia, bienaventurados sois. Por tanto, no os amedrentéis por temor de ellos, ni os conturbéis” (1 Pedro 3:14).
Este espíritu no solo afecta en lo personal sino también al Cuerpo Místico que es la Iglesia. Los seres humanos estamos llenos de pensamientos y sentimientos, que controlan nuestras vidas, en ellos tenemos conocimiento, sueños, metas, esperanzas, amor, cariño, consuelo, como también existe pensamientos y sentimientos negativos, uno de ellos es la cobardía. La cobardía es un problema que ha afectado la vida de muchas personas, por el temor, el miedo a fracasar, perder, ser herido, que se burlen de él, que lo engañen, o que nos enfermemos. El miedo a sufrir de estas cosas, paralizan al ser humano, le impiden avanzar, tomar decisiones, arriesgarse. Este espíritu es contrario a la fe, nos limita a movernos en el reino; nos inmoviliza para que la obra de Dios no se concrete.
La palabra "cobarde" proviene del francés couard (también predecesora del término inglés coward). El origen se remonta al francés medieval coart, y ésta vendría de coue (cola), del latín cauda, que significa cola, y que haría alusión a la cola del perro y del lobo, que la esconden entre las piernas para mostrar sumisión y miedo, o sea, cuando "sienten cobardía".
CARACTERÍSTICAS DE ESTE ESPÍRITU DE COBARDÍA.
• Este espíritu hace que todo lo cuestionemos y lo analicemos.
• Este espíritu se mueve en las emociones haciendo que las personas tengan miedo y se sientan inútiles y poco capacitada para hacerlo.
• Este espíritu con sus labios imparte temor a los que le escuchan por medio de la transferencia, recordemos a los espías en Jericó.
• Este espíritu no deja que la paz de Dios inunde el corazón de los creyentes.
• Este espíritu impide el crecimiento de los creyentes.
• Este espíritu impide el avance del Reino de Dios.
• Este espíritu hace que limitemos las capacidades que Dios nos ha dado.
• Este espíritu trae consecuencia de pecado ya que no obedecemos a las directrices del Señor.
• Este espíritu nos lleva a la insatisfacción espiritual.
• Este espíritu nos lleva al desierto.
• Este espíritu constriñe al Espíritu Santo.
• Este espíritu limita el poder de Dios.
• Este espíritu nos hace sentirnos tristes y no felices en lo que hacemos.
• Este espíritu ejerce una influencia destructiva en todo lo que toca.
• Este espíritu no deja el descanso placentero del cuerpo, sino lo opuesto trae fatiga, cansancio e insomnio.
• Este espíritu usa nuestros conflictos internos para atar nuestra vida.
• Este espíritu pone una muralla en el corazón para que la Palabra no de fruto.
• Este espíritu hace que el creyente todo lo juzgue como condenatorio.
• Este espíritu nos hace ser indolentes en la obra de Dios.
• Este espíritu toma control de la mente y las decisiones.
• Este espíritu atrae más demonios a la vida de las personas.
• Este espíritu trabaja de la mano con el espíritu de: Aarón, de sordera y de Mical.
En la Palabra de Dios, aparece dos veces la palabra cobardía:
PRIMERO. Levítico 26:36: Y a los que queden de vosotros infundiré en sus corazones tal cobardía, en la tierra de sus enemigos, que el sonido de una hoja que se mueva los perseguirá, y huirán como ante la espada, y caerán sin que nadie los persiga.
SEGUNDO. 2 Timoteo 1:7: Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.
CONCLUSIÓN: La cobardía significa timidez, otro factor que afecta a muchos cristianos, su timidez les impide hablar, enseñar, expresar su fe, defender; la timidez también afecta su vida cotidiana, la vergüenza, la pena, el miedo a ser rechazados, a que le digan que no, o el temor de hablarles a otras personas, los paraliza.
Los animo a reflexionar sobre este tema y estemos avanzando con firmeza, con metas claras y determinados a conquistarlas, primeramente, en lo espiritual y en segundo lugar en lo secular.
Pastor Israel Fuentes.
Buenas Tardes Apostólicas
No hay comentarios:
Publicar un comentario